Grecia    Página 4  

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La Edad Oscura

Bajo dicha denominación se oculta un período de la Historia de Grecia que abarcaría, muy aproximadamente, desde el siglo XII-XI al IX-VIII a.C. y que recibe éste nombre debido a la casi total falta de documentación para su reconstrucción. Es imprescindible eliminar cualquier tipo de consideración peyorativa sobre dicho período, ya que por el hecho de que no se conserven datos escritos sobre el mismo no se ha de presuponer que haya sido una época decadente, tan sólo se trata de una época de la que apenas conocemos nada. No hay que olvidar que hasta el siglo VIII a.C. no reapareció la escritura y que fue entonces cuando se transcribió la tradición oral que representaba los acontecimientos históricos ocurridos durante el período y que había pasado de boca en boca por medio de los cantores épicos o aedo. El propio Homero pudo ser uno de estos poetas orales, e incluso pudieron ser varios o el nombre de un grupo de artistas que realizasen sus obras bajo esa misteriosa firma que es Homero.

La primera fase de la Edad Oscura estuvo marcada por una serie de migraciones y grandes movimientos de población, algo que por otro lado llevaba produciéndose desde hacía siglos en la región. Pero precisamente en la Edad Oscura fue cuando parece que se consolidaron los asentamientos y se pusieron los pilares de unas comunidades que con el tiempo se convirtieron en el eje de todo el desarrollo histórico posterior. Parece ser que a lo largo de la Edad Oscura se puso fin a las influencias del exterior sobre la población griega, que a partir de ese momento se concentró en su sustrato ancestral y protagonizó desde él un desarrollo autóctono que daría lugar a la Grecia Clásica. Este bloqueo de las influencias externas tuvo una salvedad, las costumbres funerarias, en las cuales el rito de la cremación se extendió, aunque no llegó a generalizarse plenamente y parece que fue más una moda que un rasgo distintivo de un supuesto grupo étnico nuevo. Posiblemente la cremación proviniese de Asia Menor, donde era una costumbre muy arraigada. Otro rasgo característico fue la expansión de la metalurgia del hierro, que quizá penetró en Grecia a través de Chipre.

La cerámica, auténtico fósil director de éste período, tuvo una fuerte tendencia hacia el localismo, ya no existió un estilo único que fuese evolucionando a lo largo del tiempo, sino que en cada región se crearon tipologías diferentes que tuvieron distintos marcos evolutivos. Con todo, y teniendo en cuenta importantes desfases cronológicos entre las distintas zonas, se puede hablar de que para la Edad Oscura el estilo cerámico sería en un primer momento el conocido como protogeométrico, el cual a partir de el siglo IX a.C. sería sustituido por el geométrico, que perduró ya hasta la Grecia Arcaica. La mayor evolución tecnológica, en lo que a la fabricación de cerámica se refiere, consistió en el uso de un torno más rápido, que mejoró las superficies de los útiles y que simplificó las formas decorativas.

 

Organización político-social durante la Edad Oscura

La mejor descripción de las formas de vida durante la Edad Oscura nos ha llegado a través de Homero en su descripción del escudo de Aquiles (Ilíada, 478-452).

La sociedad de este período se dividía en dos partes bien diferenciadas, por un lado los hombres libres y por otro los esclavos. Los hombres libres se diferenciaban a su vez entre nativos del país y forasteros, éstos últimos parece ser que carecían de derechos y que sólo estaban protegidos por las costumbres y la religión, ya que carecían del apoyo del linaje y de la comunidad. Una división interna de la sociedad era la de miembros de la aristocracia y el pueblo o demos. Entre ambos se encontraban los artesanos (demiorgói) que tenían una posición ambigua entre ambos.

En lo que se refiere a la vida política existían una serie de instituciones que con ciertas transformaciones perduraron a lo largo de toda la Historia de la Grecia Clásica. La ágora era la asamblea de todos los varones adultos que se encontraba subordinada a un consejo de ancianos, la boulé, integrada por los cabezas de familias nobles, los basilees. Existía también un cuerpo de funcionarios encargados de la administración y que dependían directamente del consejo de ancianos. Las decisiones se tomaban ante el pueblo, pero no existía ningún tipo de votación, no obstante, la necesidad de convencer al pueblo de los beneficios de las decisiones a adoptar convirtió en imprescindible el saber manejar el arte del discurso y la retórica. Por último, el basileus, era un cargo unipersonal que teóricamente estaba al frente del Estado pero cuyas decisiones estaban sujetas a la aprobación de las asambleas.

El eje de la formación política griega era una concepción muy peculiar, la denominada ciudad-estado o polis, que puede definirse como una comunidad pequeña, independiente y autogobernada, formada por una única ciudad y su territorio. Las más antiguas polis ya existían en la Edad del Bronce, pero la gran eclosión y desarrollo de las mismas no se produjo hasta los alrededores del siglo VIII a.C. A finales de la Edad Oscura las polis estaban constituidas por un recinto amurallado dentro del cual existía un lugar para las asambleas y los templos, realmente esto, que posteriormente fue conocido como acrópolis, era lo que a lo largo de la época homérica se conoció por polis; no siendo la polis de la Grecia Clásica otra cosa que el desarrollo de esta primitiva organización. A los pies de las polis homéricas se extendía el asty, el núcleo urbano propiamente dicho, cuyo centro de asambleas se denominaba ágora.

 

                                                                                        

Fundación Educativa Héctor A. García