Estado del centro-E de América del Sur,
que se extiende desde el macizo de las Guayanas hasta la cuenca del Río de
la Plata. Es por su extensión el primer país sudamericano, el tercero de
América y el quinto del mundo. Limita al N con Colombia, Venezuela,
Guyana, Surinam, la Guayana Francesa y el océano Atlántico, al E con el
Atlántico, al S con Uruguay, Argentina, Paraguay y Bolivia, y al O con el
Perú y Colombia.
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EL MEDIO FÍSICO
El territorio brasileño está compuesto en su mayor parte por una
plataforma o zócalo formado antes de la era primaria, recubierto por rocas
sedimentarias e inclinado de E a O. Una de sus principales características
es la monotonía del relieve, constituido por llanuras y mesetas planas,
con ausencia de cordilleras y picos elevados. Dentro de esta uniformidad,
se distinguen dos grandes regiones geográficas: la Amazonia, al N, y un
sector de mesetas y tierras altas que forma una gran franja por el E y S
del país.
La Amazonia es una vasta llanura que ocupa una gran hendidura del zócalo
básico, rellenada por sedimentos acumulados en la era terciaria y surcada
por la gran cuenca del río Amazonas y sus afluentes, y en la cual la selva
ecuatorial forma un espeso tapiz que constituye el mayor “pulmón verde”
del planeta. Está limitada, al N, por una franja montañosa compuesta por
diversas sierras que constituyen el reborde meridional del macizo de las
Guayanas, entre las cuales se destacan, de O a E, las sierras de Parima,
Pacaraima, Acaraí y Tumucumaque.
Al S de la Amazonia se levantan los macizos del escudo brasileño, que
forman varias sierras y chapadas (pequeñas mesetas con una vegetación
compuesta por sabanas y arbustos espinosos, y limitadas por relieves en
cuesta). En el NE, la sierra de Ibiapaba separa las chapadas de Piauí y
Ceará; más al E, el zócalo emerge de los sedimentos formando pequeños
relieves aislados que se prolongan hasta el litoral. Este sector se
mantiene por debajo de los 1.000 m, mientras que en el E y el SE el
levantamiento del zócalo ha originado un sector de tierras altas, que se
extienden hacia el S formando varios cordones montañosos paralelos a la
línea costera. La chapada Diamantina, al O de la ciudad de Salvador (estado
de Bahía), se eleva a más de 1.800 m en el pico de las Almas, mientras que
en el SE, la sierra de Mantiqueira, que bordea la costa, desde Sao Paulo
hasta Río de Janeiro, supera ampliamente los 2.800 m en el pico de
Bandeira.
En el centro y O de Brasil se elevan la meseta de Brasilia, constituida
por un conjunto de sierras y chapadas, y el gran macizo del Mato Grosso,
que forma la divisoria de aguas entra la cuenca del Amazonas y el Río de
la Plata, y limita por el norte la región del Pantanal, avenada por los
ríos que al unirse originan el río Paraguay. Más al E, el río Paraná
desciende de los macizos centrales, en dirección al N-S, flanqueado al O
por las mesetas del Mato Grosso meridional y al E por las de Sao Paulo.
HIDROGRAFÍA
La mitad N del país corresponde a la cuenca del Amazonas, la más extensa
del mundo (unos 7 millones de km2, más de la mitad del territorio nacional).
Este río, que con sus numerosos afluentes riega la vasta llanura de la
Amazonia, nace en la cordillera andina con el nombre de Ucayali, y desde
su unión con el Marañón hasta la ciudad de Manaus recibe el nombre de
Solimoñes; toma el de Amazonas a partir de Manaus, donde recibe las aguas
del río Negro, y más abajo, hasta su desembocadura, recoge por la derecha
las del Madeira (3.240 km), el Tapajós (1.980 km) y el Xingu (1.990 km),
sus principales afluentes en suelo brasileño, los cuales abarcan a su vez
grandes cuencas secundarias. Es navegable por buques oceánicos hasta la
ciudad de Iquitos, en el Perú, y en su desembocadura forma un estuario con
varias islas.
En el extremo oriental sobresalen tres ríos principales: el Tocantins
(2.640 km), que nace en la meseta de Brasilia y desemboca junto al delta
del Amazonas, el Parnaíba (1.700 km) y el Sao Francisco (3.161 km), que
desemboca al S del cabo Sao Roque. Finalmente, en el S tienen su origen
los grandes ríos que forman la cuenca del Río de la Plata: el Paraguay
(2.800 km), que nace en el Mato Grosso con el nombre de Diamantino; el
Paraná (4.500 km), afluente del anterior, que nace al S de la meseta
brasileña, de la unión de los ríos Paraníba y Grande; y el Uruguay (1.700
km), que vierte directamente sus aguas en el estuario del Plata.
EL LITORAL Y LAS ISLAS
Brasil tiene más de 7.000 km de costas, en general bastante uniformes. El
tramo más septentrional, del cabo Orange hasta la bahía de Marajó, es bajo
y anegadizo. Se encuentran en este sector la isla de Maracá y, más al S,
el estuario del Amazonas, que forma numerosos canales y varias islas, la
más extensa de las cuales es la de Marajó. A continuación, hasta el
saliente del cabo Sao Roque, en el NE, el litoral se vuelve más abrupto.
Frente al cabo Sao Roque, a unos 350 km de la costa, emerge el pequeño
archipiélago de Fernando de Noronha (26 km2). El tramo siguiente lo ocupa
una gran franja de hermosas playas, que bordea la bahía de Recife y se
prolonga hacia la de Todos los Santos, junto a la ciudad de Salvador.
Sucesivamente, descendiendo hacia el S, se encuentran la bahía de Ilha
Grande, junto a Río de Janeiro, parcialmente cerrada por la isla homónima,
la isla de Sao Sebastiao, junto a la bahía de Santos, la bahía de Paranguá,
las islas de Sao Francisco y Santa Catarina, y el cabo de Santa Marta. Por
último, el sector meridional, hasta la frontera con Uruguay, lo ocupan
varias lagunas costeras entre las que se encuentra la gran laguna dos
Patos, que se extiende a lo largo de unos 280 km, desde la ciudad de Porto
Alegre hasta la de Río Grande.
EL CLIMA
Predomina en todo el país el clima cálido, con unos 22°C de temperatura
media anual, aunque se distinguen varias zonas climáticas que presentan
diferencias relativamente notables entre sí. El clima de la Amazonia es
típicamente ecuatorial, con temperaturas de 23-25 °C, prácticamente
constantes durante todo el año, y lluvias muy abundantes (2.500 mm anuales).
En la franja central, salvo en el extremo NE, de clima semiárido, domina
el clima tropical, con una estación lluviosa de octubre a marzo y una
estación seca de marzo a septiembre. En el S del país el clima es de tipo
subtropical, con 15 °C de temperatura media y una estación lluviosa que
transcurre durante los meses invernales.
ECONOMÍA Y SOCIEDAD
Brasil, que es en la actualidad uno de los países más industrializados de
América del Sur, a principios del siglo XX era todavía un país de economía
exclusivamente agrícola y ganadera. Racionalizando los recursos del sector
primario y la explotación de sus reservas mineras, puso en marcha un
ambicioso programa de desarrollo industrial que, a partir de los años
cincuenta y sobre todo durante la década de 1970, obtuvo resultados
ciertamente espec-taculares. Esta extraordinaria expansión, sin embargo,
ha de ser matizada debidamente. El llamado “milagro brasileño”, con un
gran crecimiento de la producción industrial, no logró sacar del
subdesarrollo profundo a grandes sectores de la población, incrementó
además las diferencias sociales y regionales, ya de por sí notables, y
acentuó la dependencia respecto a los capitales extranjeros.
La agricultura, que utiliza aproxima-damente el 10% de la superficie total
y ocupa al 18% de la población activa, proporciona todavía una gran parte
de las exportaciones: Brasil es el primer productor mundial de café, y se
encuentra en los primeros lugares entre los países productores y
exportadores de cacao, algodón, naranjas, bananas, soja, tabaco y azúcar.
Hay que destacar además, entre los principales productos destinados al
consumo interior, las elevadas producciones de maíz, arroz, tubérculos
(papas, mendioca), hortalizas y frutales.
La ganadería brasileña cuenta con la segunda cabaña mundial de bovinos
(165 millones de cabezas), que se explota en régimen extensivo en el NE y
en las sabanas del Mato Grosso y el Pantanal, y en régimen intensivo en
los pastos naturales mejorados del extremo meridional. En Minas Gerais se
cría vacuno de leche, el ganado lanar se concentra en el S, y en las
tierras áridas del NE predomina el ganado cabrío. Los productos forestales,
principalmente maderas preciosas, pino de Paraná, caucho y ceras vegetales,
alcanzan también una importancia extraordinaria, ya que la masa de
vegetación arbórea, que comprende la selva ecuatorial en la Amazonia y el
bosque tropical en el S, ocupa en conjunto dos tercios de la superficie
total del país. La pesca tiene en cambio un interés muy secundario en la
creación de riqueza, puesto que no ha evolucionado como los demás sectores
productivos y apenas llega a cubrir las necesidades del consumo interno.
La minería, que ha sido uno de los pilares básicos del desarrollo
industrial, dispone de abundantes reservas en el subsuelo cuya explotación
puede aún incrementarse notablemente. Proporciona una de las primeras
producciones mundiales de hierro, dispone de cuantiosas reservas auríferas
en la Amazonia (Sierra Pelada, en el estado de Pará), y los yacimientos de
platino representan casi la mitad de las reservas mundiales conocidas. Se
extrae además petróleo, gas natural, uranio, diamantes, níquel, cobre,
manganeso, bauxita, volframio y mica.
La expansión del sector industrial ha incidido especialmente en el
desarrollo de las industrias pesadas (acerías de Río de Janeiro, Sao Paulo
y Minas Gerais; metalurgia del cobre, del plomo y del aluminio), los
astilleros, la industria del armamento, mecánica (material ferroviario,
tractores, maquinaria), automovilística, química, petroquímica,
farmacéutica, etc. Paralelamente, se ha incrementado la producción de las
industrias tradicionales: alimentaria (café, azúcar, congelados cárnicos),
textil, derivados de la madera, papel y cemento.
La densidad de población es relativamente baja, y todavía elevada la tasa
de crecimiento anual, si bien mantiene la tendencia a disminuir de forma
lenta y progresiva. El problema principal es el desequilibrio existente en
la distribución espacial de los habitantes: casi el 75% se acumula en los
estados del SE y del NE, mientras que la Amazonia y la zona central y
occidental presentan grandes vacíos demográficos. La población urbana se
concentra en una proporción importante en el llamado Marco Eixo, la
conurbación que une de forma casi continua las zonas metropolitanas de Sao
Paulo y Río de Janeiro.
HISTORIA
El territorio brasileño fue descubierto por Vicente Yáñez Pinzón en 1500.
El mismo año, Pedro Alvares Cabral tomó posesión de las tierras de Bahía
en nombre del rey de Portugal, en aplicación del tratado de Tordesillas
(1494). Portugal dejó la labor colonizadora en manos de donatrários, pero
en 1530 empezó la inmigración portuguesa. En 1549 se nombró gobernador a
Tomás de Sousa, impulsor del servicio militar obligatorio y de la trata de
esclavos. en 1604 se creó el Conselho de India, imitación del Consejo de
Castilla. La colonización de los altiplanos fue realizada por los
bandeirantes. La unión de España y Portugal en 1580 provocó las
incursiones de los piratas ingleses. Los holandeses ocuparon Pernambuco en
1630, pero debieron abandonarla en 1653. El tratado de San Ildefonso
(1777) fijó los límites de las posesiones españolas y portuguesas.
Inglaterra obtuvo el monopolio del comercio con Brasil en 1703. La fiebre
del oro del siglo XVIII impulsó la colonización del interior del país. La
época colonial se caracterizó por los conflictos sociales entre los
colonizadores europeos y los indios, africanos, mamelucos (mestizos),
mulatos y cafusos (mestizos de indios y negros). La gestión del ministro
de José I, el marqués de Pombal, impulsó el comercio, la minería, la
agricultura, la enseñanza y las obras públicas; abolió la esclavitud de
los indios, aunque se intensificó la importación de negros africanos.
En
1759 se decretó la expulsión de los jesuitas. Como consecuencia de la
invasión de Portugal por Napoleón, la familia real se trasladó a Brasil
(1808). La desvinculación de la metrópoli obligó a adoptar una política
independiente. Cuando Juan IV regresó a Portugal para ocupar nuevamente el
trono, dejó a su hijo Pedro como regente de la colonia. Para evitar que
ésta siguiera los pasos de las otras colonias americanas que se habían
convertido en repúblicas, Pedro lanzó el grito de Ypiranga, declaró la
independencia y se proclamó emperador (1822). En 1831, Pedro I se vio
obligado a abdicar en favor de su hijo, Pedro II, para regresar a Portugal
y ocupar el trono de este país. Durante su mandato se introdujo el cultivo
del café, se tendieron líneas férreas y se abolió la esclavitud (1888).
En 1889 estalló el pronunciamiento que derrocó al monarca e implantó la
República, y en 1891 se votó una nueva Constitución, inspirada en la de
EUA. En 1930 se produjo el golpe de Estado de Getúlio Vargas, quien
implantó una dictadura de cariz populista, abolió la Constitución y
disolvió el Parlamento. Durante la Segunda Guerra Mundial, Brasil rompió
con el Eje para alinearse con los aliados. En 1945 Vargas fue derrocado
por el golpe militar liderado por Eurico Gaspar Dutra, pero las elecciones
de 1950 volvieron a llevar a Vargas al poder (1950-54). En 1955 venció el
socialdemócrata Juscelino Kubitschek, quien emprendió una política
económica que condujo al país a una crítica situación financiera. En 1961
fue elegido Janio Quadros, sucedido por Joao Goulart, quien gobernó con el
apoyo del campesinado y algunos sectores del ejército; en 1964 fue
derrocado por un golpe militar apoyado por la oligarquía. El general
Humberto Castelo Branco fue elegido presidente. Lo sucedieron los
generales Arturo de Costa e Silva (1967) y Emílio Garrastazú Médici
(1969).
En 1974 pasó a ocupar la presidencia el general Ernesto Geisel, durante
cuyo mandato se adoptaron reformas constitucionales de carácter
aperturista. En 1979 asumió la presidencia el general Joao Baptista
Figueiredo, quien continuó impulsando medidas liberalizadoras. En 1985, un
colegio electoral eligió a Tancredo Neves, candidato de la oposición al
oficialismo, fallecido ese mismo año y sustituido por José Sarney.
Aprobada la Constitución en 1988, en 1989 era elegido el conservador
Fernando Collor de Melo, destituido en 1992 acusado de corrupción. Tras la
presidencia de Itamar Franco, en 1994 fue elegido el socialdemócrata
Fernando Henrique Cardoso, reelegido en 1998, en medio de una profunda
crisis financiera y económica.
BRASIL EN CIFRAS
Nombre oficial: República Federativa del Brasil
[República Federativa do Brasil]
Superficie: 8.511.996 km2
Población: 146.917.460 hab.
Capital: Brasilia (1.598.415 hab.)
Ciudades principales: Sao Paulo (9.626.880 hab.), Río de Janeiro
(5.473.345 hab.), Salvador (2.072.060 hab)
DEMOGRAFÍA
Densidad: 17 hab./km2
Tasa de crecimiento anual: 1.7%
Natalidad: 20,8%
Mortalidad: 6,9%
Mortalidad Infantil: 57%
Esperanza de vida: 67 años
Composición de la población: blancos (54$), mestizos (59%), negros (6%)
ECONOMÍA
Moneda: real (1 real del Brasil = 100 centavos)
Producto nacional bruto PNB: 536.309 millones de dólares
PNB por habitante: 3.370 dólares
Distribución del PIB por sectores: agricultura (5%), industria (49%),
servicios (49%)
Principales productos de exportación: café, hortalizas, fruta, cacao,
tabaco, pieles,
maquinaria, acero, hierro, petróleo
SOCIEDAD
Lenguas: portugués (oficial), lenguas amerindias
Gentilicio: brasileño
Forma de estado: república federal presidencialista
Religión: catolicismo
Tasa de alfabetización: 83%
Población urbana: 77%
Índice de desarrollo humano: 68°
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