Victorio Macho

(1887-1966) Escultor español, nacido en Palencia y fallecido en Toledo. Becado por la Diputación de su ciudad natal, hizo estudios artísticos en Madrid y emprendió luego una peregrinación por tierras de España donde se abasteció de material popular para su obra futura. En 1921 hizo una gran exposición en el Museo de Arte Moderno madrileño y en 1932 le fue reservada una sala en el pabellón español en la Exposición de Venecia.

En 1924 se unió a Unamuno en su voluntario exilio de Hendaya, huyendo de la dictadura de Primo de Rivera. Emigrado a Rusia en 1937, se estableció luego en Colombia (1939), donde organizó la Academia de Bellas Artes, y regresó a España en 1952, con abundante acopio de esculturas realizadas en América.

Su obra escultórica, de sobrio y recio estilo, está diseminada por museos y monumentos de América Latina y España: sepulcro del doctor Llorente en el cementerio de San Justo, en Madrid; estatua de Pérez Galdós, en el Retiro madrileño; fuente de Concha Espina, en Santander; busto de Unamuno en la Universidad de Salamanca; monumento a Juan Sebastián Elcano, en Guetaria; estatua de Sebastián de Belalcázar, en Cali (Colombia); monumento a Belisario Porras, en Panamá, etc.

En su ciudad natal realizó el monumental Cristo del Otero. Su casa de Toledo, la «Roca Tarpeya», se halla actualmente dedicada a museo.