1772 Fray Iñigo Abad -
Historia
geográfica,
civil y
natural de
la isla de
Puerto Rico
1797 Aparece la Bomba Puertorriqueña y su
practica es libre y sin restricciones
1809 Un
puertorriqueño, Ramón Power, nos representa en España.
1828 Aparece el Cuatro Puertorriqueño
1839 Aparece el primer documento historico
sobre la danza puertorriqueña
1849: Libro El Gibaro de Manuel Alonso - nos
habla de las tradiciones puertorriqueñas
1860 De acuerdo al censo hay
241,037 negros libres en Puerto
Rico, activos en su cultura
La
identidad cultural es un conjunto de valores, reivindicaciones,
tradiciones, símbolos, creencias y comportamientos que sirven como
elementos de referencia dentro de un grupo social y permiten que los
individuos que lo conforman puedan fundamentar su sentimiento de
pertenencia. También corresponde a la sumatoria de las diferentes
identidades individuales que conforman un grupo social, ya que son todos
elementos que permiten identificarnos, caracterizarnos y mostrar qué
tenemos en común y qué nos diferencia de otros lugares o culturas.
A finales del siglo 18 llegó a la isla
de Puerto Rico, Fray Iñigo Abad, con la encomienda de documentar la
población criolla naciente y sus caracteristicas, lo cual hizo entre
1772 al 1778.
Los primeros
Españoles
que se
establecieron
en esta isla
corrigieron
en parte el
carácter de
los indios,
tomando de
estos al
mismo tiempo
el modo de
vivir,
alimentarse
y alojarse;
dejaron
mucha parte
de las
costumbres
de su
educación
con su trato
y mudanza de
clima; la
misma
variación se
observa en
los animales,
plantas y
semillas que
se
transportan
de España á
la América.
Con el
arribo de
los negros y
de otros
diferentes
colonos de
Europa,
África y
América, que
forman la
población de
esta isla,
ha resultado
mayor
variedad de
colores y
castas.
Abbad, a
finales del
siglo XVIII,
es el
primero en
definir al
puertorriqueño
o, más
propiamente,
al criollo.
Lo hace
anteponiéndolo,
en primer
término, a
los europeos
o blancos; o
como el
mismo los
define, como;
los “hombres
de la otra
banda.
Tomado de
Agustín
Iñigo Abbad
y Lasierra,
Historia
geográfica,
civil y
natural de
la isla de
San Juan
Bautista de
Puerto Rico
(1788)
Definición
Los hijos de
esta tierra
“son bien
hechos y
proporcionados;
apenas se ve
en la isla
un lisiado.
Su
constitución
es delicada
y en todos
sus miembros
tienen una
organización
muy fina y
suave,
propia de un
clima cálido;
pero este
mismo los
hace
perezosos,
los priva de
la viveza
regular de
las acciones
y les da un
color y
aspecto que
parecen
convalecientes.
Enfocando
sus
cualidades
sicológicas,
añade el
benedictino,
“son
pausados,
taciturnos y
están
siempre en
observación;
pero de una
imaginación
viva para
discurrir e
imitar
cuanto ven;
aman la
libertad,
son
desinteresados
y usan de la
hospitalidad
con los
forasteros;
pero son
vanos e
inconstantes.
Tienen
inclinación
á las
acciones
brillantes y
de honor, han
manifestado
intrepidez
en la guerra
y sin duda
son buenos
soldados
para
expediciones
y campañas
cortas, pues
acostumbrados
á una vida
sedentaria
sienten
dejarla por
mucho tiempo;
se inclinan
más á las
expediciones
navales y se
dedican al
corso y
contrabando
con afición
y valentía;
resisten
mucho el
hambre y
tienen
grande
espíritu y
resolución
para un
abordaje.
Miran con
tedio á los
Europeos: el
demasiado
ardor y
vivacidad de
estos en sus
operaciones
los incomoda
y les domina
siempre la
emulación;
pero los
reciben con
franqueza en
sus casas,
los
alimentan y
mantienen
con gusto y
se glorían
de descender
de ellos.
Las mujeres
aman á los
Españoles
con
preferencia
á los
criollos:
son de buena
disposición;
son fecundas,
aficionadas
al baile y a correr á
caballo, lo
que ejecutan
con destreza
y
desembarazo
extraordinario.
Los mulatos,
de que se
compone la
mayor parte
de la
población de
esta isla,
son los
hijos de
blanco y
negra. Su
color es
oscuro
desagradable,
sus ojos
turbios, son
altos y bien
formados,
más fuertes
y
acostumbrados
al trabajo
que los
blancos
criollos,
quienes los
tratan con
desprecio.
Entre esta
clase de
gentes hay
muchos
expeditos y
liberales
para
discurrir y
obrar; se
han
distinguido
en todos
tiempos por
sus acciones
y son
ambiciosos
de honor.
Como sus
amos
españoles vienen
de diversas
provincias
son también
de diversas
inclinaciones,
no obstante,
se puede
decir que su
carácter y
opiniones
las forman
en mucha
parte sus
amos:
si estos los
aman y
tratan con
cariño
corresponden
hasta el
heroísmo;
pero si son
demasiadamente
rígidos
saben sufrir
y disimular
sus
sentimientos
hasta tener
ocasión de
vengarse, lo
que ejecutan
con venenos,
empleándolos
en los
ganados, en
los otros
esclavos y
en cuanto es
útil á su
enemigo;
algunos
especialmente
los de Mina
se quitan á
sí mismos la
vida
persuadidos
que van á
renacer en
su patria,
que tienen
por el mejor
país del
mundo: son muy
inclinados
al baile y á
la música y
mucho más al
otro sexo y
á la
venganza.
De esta
variedad y
mezcla de
gente
resulta un
carácter
equívoco y
difícil de
explicar:
pero á todos
convienen
algunas
circunstancias
que podemos
considerar
como
características
de los
habitantes
de
Puerto-Rico:
el calor del
clima los
hace
indolentes y
desidiosos;
la
fertilidad
del país que
les facilita
los medios
de
alimentarse
los hace
desinteresados
y
hospitalarios
con los
forasteros;
la soledad
en que viven
en sus casas
de campo los
acostumbra
al silencio
y cavilación;
la
organización
delicada de
su cuerpo
auxilia la
viveza de su
imaginación
que los
arrebata á
los extremos;
la misma
delicadeza
de órganos
que los hace
tímidos, los
hace mirar
con
desprecio
todos los
peligros y
aun la misma
muerte; las
diferentes
clases que
hay entre
ellos
infunden
vanidad y
orgullo en
unos,
abatimiento
y emulación
en otros.
Tomado de
Agustín
Iñigo Abbad
y Lasierra,
Historia
geográfica,
civil y
natural de
la isla de
San Juan
Bautista de
Puerto Rico
(1788 /
1979) Río
Piedras:
EDUPR.
Aunque existen referencias del siglo 18 en que el
criollo puertorriqueño iba transformando la música española en una con
formas más regionales y propias, no es hasta el siglo 19 que estas van
tomando forma de manera amplia. Para el 1828 ya existe el cuatro
puertorriqueño, nuestro instrumento nacional y es a partir de este
momento en que ya podemos hablar de una identidad cultural
puertorriqueña en lo que se refiere a la Música Jibara. En cuanto a la
música afroboricua, para el 1797 Andre Pierre Ledrú, en su libro Viaje a
la Isla de Puerto Rico, menciona que al visitar Loiza Aldea, vio a los
negros libertos practicar sus bailes de Bomba. Era obvio que la música
de origen español se practicara desde mucho antes, pero como documento
histórico esta es la mención más antigua.
Después del ataque a la ciudad de San Juan y sus
vecindades por parte de los Ingleses en 1797 los criollos, mestizos y
negros, lograron que España a través del gobernador Ramón de Castro, les
empezara a tomar en cuenta. Si a esto le añadimos la colaboración que
tuvo Puerto Rico para combatir la invasión de las fuerzas Napoleónicas a
Madrid, veremos esto con unos avances en representación en las cortes de
Cádiz. Comienza el Siglo 19 con varios avances económicos, el azúcar,
café, tabaco, la imprenta, maderas, cueros y otros frutos menores,
combinado con mayor comercio con la metrópoli y otros países permitidos
por España. Esto trae como consecuencia un florecimiento económico lo
que permite que se funden escuelas y seminarios para cursos mas
avanzados, la clase pudiente que cada vez se acrecentaba podía enviar a
sus hijos a estudiar carreras de leyes, medicina o letras en Europa.
Para el 1809 un puertorriqueño, Ramón Power y
Giralt es enviado a las cortes Españolas en representación de Puerto
Rico. El 4 de mayo de 1809, en medio de la Guerra de la Independencia
Española contra las tropas francesas de Napoleón, Power fue elegido por
los cinco cabildos de Puerto Rico para representar a la isla en la Junta
Suprema Central y Gubernativa del Reino. La Junta Suprema se disolvió
antes de la llegada de Power. Sin embargo, el 16 de abril de 1810 fue
elegido nuevamente para representar a Puerto Rico en las Cortes de Cádiz.
Uno de sus principales aliados fue el influyente obispo de Puerto Rico
Juan Alejo de Arizmendi quien, durante la Misa de despedida oficial,
donó a Power su anillo episcopal como recordatorio de que nunca debería
olvidar a sus paisanos.
Para
los mediados del siglo 19 aparece la publicación del Aguinaldo
Puertorriqueño (1843) y al otro año Manuel Alonso (El Gíbaro) escribe un
artículo para el libro "Album Puertorriqueño" en donde varios criollos
que estudiaban en España escriben este libro en recordación a la tierra
y sus costumbres.
En su descripción del puertorriqueño nos dice:
Color moreno, frente despejada
mirar lánguido, altivo y penetrante,
la barba negra, pálido el semblante,
rostro enjuto, nariz proporcionada.
Mediana talla, marcha acompasada;
el alma de ilusiones anhelante,
agudo ingenio, libre y arrogante,
pensar inquieto, mente acalorada.
Humano, afable, justo, dadivoso,
en empresas de amor siempre variable,
tras la gloria y placer siempre afanoso,
y en amor a su patria insuperable.
Este es, a no dudarlo, fiel diseño
para copiar un buen puertorriqueño.
En el libro "El Gíbaro" Alonso nos describe los "bailes de garabato" y
en sus descripciones nos habla de la "orquesta jíbara" en donde nos
habla del tiple como el instrumento mas pequeño y agudo, el cuatro (de
cuatro cuerdas), la bordonúa que era la "guitarra jíbara "con sus graves
notas, la maraca y el güiro. Era con esta orquesta que hacían bailes
como el fandanguillo, las cadenas, el cabayo y el seis. En 1828 aparece
por primera vez la palabra cuatro como instrumento en uno de los
periódicos de la época.
Ya para los años 1850 teníamos compañías teatrales, de ópera, de
zarzuela bandas militares, orquestas y otros viajando por nuestras
ciudades y enriqueciendo nuestro acervo cultural de las ciudades, porque
al campo no llegaba nada de esto. Tenemos que entender que las vías de
comunicación entre los pueblos eran pésimas y casi siempre recurrían a
ir por la ruta acuática. Los campesinos y peones que viajaban de pueblo
en pueblo probablemente escuchaban la música interpretada en las
retretas. Los bailes de casino tocaban música mayormente europea pero
eso va cambiando ante los nuevos ritmos de la upa y la contradanza entre
otros. Nuestro jíbaro empieza a interpretar ritmos y piezas como el vals,
la mazurka, la polka, el paso doble y otros. Cerca de este tiempo es que
empieza a nacer la "Danza Puertorriqueña" y sus atrevidos ritmos que
algunos de ellos son cercanos a la guaracha y al seis en sus primeras
formas. Entran en el panorama Manuel Gregorio Tavárez, Juan Morel
Campos, Juan Ríos Ovalle y muchos otros. Pero es Morel quien en sus
presentaciones y bailes tenía cuatristas entre sus músicos. Así que ya
vemos un instrumento calificado como de "plebeyo "codeándose entre los
otros considerados como mas avanzados.
La Bomba
La mención escrita más
antigua de dicho baile en Puerto Rico data de 1797, cuando, en
ocasión de la visita a la Isla del naturalista francés André Pierre
Ledru, observa éste el uso "del tamboril llamado vulgarmente bomba" por
parte de los obreros de una hacienda, mulatos y negros, como
acompañamiento de sus bailes. Para esa epoca Loiza Aldea era la
única población 100% negra y libre de Puerto Rico, hoy dia su población
es de un 90% de negros aproximadamente. Luego se nombra la
Bomba, en un documento administrativo del gobernador D. Miguel de la
Torre, del año de 1826, al aludirse a los "bailes de bombas de pellejo u
otras sonajas de que usan los bozales", y más adelante, en sus Memorias
(año de 1833), califica Pedro Tomás de Córdova a las "bombas y otros
instrumentos [como} propios en los bailes de morenos". La denominación
del tambor se hizo extensiva posteriormente en el país, por natural
asociación, a los cantos y bailes que con él se acompañaban. Fuera de
Puerto Rico, dice Fernando Ortiz haber oído hace años el nombre de bomba
aplicado en Santiago de Cuba, no a un tipo específico de tambor, sino,
con sentido genérico, a todas las clases de tambores de negros.
Aunque ya desde 1797 los negros
pacticaban sus costumbres danzarias en Loiza Aldea, en 1860 241,000
negros que habian sido esclavos ahora eran libres y podian practicar sus
tradiciones y costumbres. Los 42,000 esclavos que quedaban fueron
liberados para 1873, 13 años antes que en Cuba.
Música Gibara y
Guaracha
En 1828, aparece por vez primera la
palabra cuatro, como instrumento en uno de los periódicos de la época.
El cuatro nació entonces unos 70 años antes que el tres cubano que nació
en 1892 con Nene Manfugas, en las fiestas de Santiago. Siendo este
nuestro instrumento nativo nacional. En el libro "El Gíbaro 1849" Manuel
Alonso nos describe los "bailes del garabato" y en sus descripciones nos
habla de la "orquesta jíbara" en donde nos habla del tiple como el
instrumento mas pequeño y agudo, el cuatro (de cuatro cuerdas), la
bordonúa que era la "guitarra jíbara "con sus graves notas, la maraca y
el güiro. Era con esta orquesta jibara que hacían bailes como el
fandanguillo, las cadenas, (el sonduro, o matatoros) el caballo y el
seis.
Manuel A. Alonso Pacheco
(San Juan, Puerto Rico, 6 de octubre de 1822 - San Juan, Puerto Rico, 4
de noviembre de 1889) fue un escritor y médico puertorriqueño. Se le
considera una de las primeras figuras literarias del Romanticismo
antillano. El 22 de octubre de 1842 ingresa en la Universidad Condal de
Barcelona donde completó el bachillerato en Filosofía. En 1848 se
doctoró en medicina y cirugía. En 1849 se publicó en Madrid su obra El
Gíbaro.
En 1849 Manuel A. Alonso
regresa a su patria, y se instala en Caguas, donde ejerce su
profesión galénica y continua, en sus ratos de ocio, su
afición literaria y periodística. Residió en España en dos
ocasiones más, entre 1858 y 1861 y luego entre 1866 y 1871,
donde ejerció la medicina. En 1871 se convierte en director
del Asilo de Beneficencia de Caguas, cargo que mantiene
hasta su muerte.
La música
tradicional del jíbaro o campesino boricua (del monte
adentro), evolucionó de la música de los soldados españoles,
de los canarios, de los franceses corsos, los africanos y
luego los nacidos en Puerto Rico. Estos pobladores antiguos
procedieron de las regiónes sureñas de España de Andalucía y
Extremadura; de las Islas Canarias; de Corcega, de
emigraciones de Haití y de la región occidental de África.
Muchos de los españoles sureños, trajeron consigo razas e
influencias arábes, siendo estos los "moriscos" o musulmanes
españoles.
Llegaron de España y trajeron los romances tradicionales,
géneros cantados como el seguidillo y la copla, y otras
tradiciones cantadas con descendencia morisca de una gran
antigüedad. Los canarios trajeron sus diminutos timples como
los africanos trajeron las memorias de sus ritmos
sincopados, su instrumentos de cuerda hechos de higueras
como sus tambores y los franceses sus bailes de salón, como
la contradanza francesa. Algunos de estos pobladores
eventualmente se trasladaron de la costa al centro montañoso
de la Isla, y en esos aislados montes ellos desarrollaron su
música con características únicas.
La
convergencia de las variadas corrientes culturales configura
nuestra música al combinar instrumentos, ritmos y melodías.
Para principios del siglo XIX, ya existía un formato para el
conjunto típico de instrumentos de la música rural compuesto
por el guiro, maracas, tiple, el cuatro, la guitarra y la
bordonúa. Se observa además en esta época como músicos
profesionales a gente negra y criollos mulatos quienes
añadieron sus tambores.
Manuel A. Alonso da
cuenta de la existencia del cuatro puertorriqueño desde 1849
y antes, además nos habla de un baile practicado en Puerto
Rico llamado Sonduro (ASUMIBLEMENTE UNA GUARACHA). Favor
leer el documento a continuación.
Guarachando al estilo puertorriqueño, de
fondo cuatrista, negrito con guiro
y joven con maracas, a su lado pareja
bailando guarachas. Cuadro del pintor puertorriqueño,
Francisco Oller.
Censos Españoles
Año
Total
Blancos
Negros
Mulatos o Mestizos
Esclavos
Población Total
1765
39,769
n/d
n/d
5,037
44,833
1777
62,618
30,709
31,909
7,592
70,210
1787
95,459
46,756
48,703
11,260
103,051
1794
109,633
n/d
n/d
17,500
127,133
1800
n/d
n/d
n/d
n/d
155,426
1802
149,859
78,281
71,578
13,333
163,192
1812
165,468
85,662
79,806
17,536
183,014
1815
n/d
n/d
n/d
n/d
220,892
1820
208,892
102,432
106,460
21,730
230,622
1827
270,798
150,311
120,487
31,784
302,672
1830
289,598
162,311
127,287
34,240
325,838
1846
391,874
216,083
175,791
51,265
443,139
1860
541,443
300,406
241,037
41,738
583,181
1877
731,648
411,712
319,936
---
731,648
1887
798,565
474,933
323,632
---
798,565
1897
885,819
570,187
315,632
---
894,302
Negra puertorriqueña 1896 en calle
Fortaleza, esquina calle De La Cruz
Historia y origen
de la música Boricua
Proyecto Salón
Hogar
Siglo
19 (1800-1899)
Nacimiento de una cultura nacional, cuando los puertorriqueños
ya se sienten diferentes a los españoles y establecen un cuerpo
único de costumbres, cocina y música y una personalidad
netamente puertorriqueña.
La
música tradicional del jíbaro o campesino boricua (del monte adentro),
evolucionó de la música de los soldados españoles, de los
canarios, de los corsos, los africanos y luego los
nacidos en Puerto Rico. Estos pobladores antiguos
procedieron de las regiónes sureñas de España de Andalucía y
Extremadura; de las Islas Canarias; y de la región occidental de
África. Muchos de estos sureños, trajeron consigo razas e
influencias arábes, siendo estos los "moriscos" o musulmanes
españoles.
Llegaron de España y trajeron los romances tradicionales, géneros cantados
como el seguidillo y la copla, y otras tradiciones cantadas con
descendencia morisca de una gran antigüedad. Los canarios trajeron
sus diminutos timples como los africanos trajeron las memorias de
sus ritmos sincopados, su instrumentos de cuerda hechos de
higueras como sus tambores. Algunos de estos pobladores
eventualmente se trasladaron de la costa al centro montañoso de la Isla, y
en esos aislados montes ellos desarrollaron su música con características
únicas.
La convergencia de las variadas
corrientes culturales configura nuestra música al combinar
instrumentos, ritmos y melodías. Para principios del siglo XIX,
ya existía un formato para el conjunto típico de instrumentos de
la música rural compuesto por el tiple, el cuatro, la guitarra y
la bordonúa. Se observa además en esta época como músicos
profesionales a gente negra y criollos mulatos.
En 1828, aparece por
vez primera la palabra cuatro, como
instrumento en uno de los periódicos de la época. El cuatro
nació entonces unos 70 años antes que el tres cubano que
nació en 1892 con Nene Manfugas, en las fiestas de Santiago. Siendo
este nuestro instrumento nativo nacional. En el
libro "El Gíbaro 1849" Manuel Alonso nos describe los "bailes del garabato" y en sus descripciones
nos habla de la "orquesta jíbara" en donde nos habla del
tiple como el instrumento mas pequeño y agudo, el cuatro (de
cuatro cuerdas), la bordonúa que era la "guitarra jíbara
"con sus graves notas, la maraca
y el güiro.
Era con esta orquesta jibara que hacían bailes como el fandanguillo,
las cadenas, (el sonduro, o matatoros) el caballo y el seis. -El sonduro es una especie de zapateado, pero con tales
arranques de entusiasmo que no solo baila la pareja única
que esta en el centro de la sala, sino que hace mover a
cuantos hay en ella.- Manuel Alonso - El Gibaro
- Cap. V. Bailes de Puerto Rico 1849.
Vease en esta imagen de la
pintura El Velorio (o Baquine) de Francisco Oller
(1833-1915), una niña con maracas en manos frente a la
puerta izquierda, un cuatrista en el medio y a un morenito
con güiro en mano detrás del cuatrista. Tambien a una pareja
bailando sonduro en el extremo izquierdo. (vea
foto ampliada)
Ya para
los años 1850 teníamos compañías teatrales, de ópera, de
zarzuela bandas militares, orquestas y otros viajando por
nuestras ciudades y enriqueciendo nuestro acervo cultural de
las ciudades, porque al campo no llegaba nada de esto.
Tenemos que entender que las vías de comunicación entre los
pueblos eran pésimas y casi siempre recurrían a ir por la
ruta acuática. Los campesinos y peones que viajaban de
pueblo en pueblo probablemente escuchaban la música
interpretada en las retretas.
Los bailes de casino tocaban música mayormente europea pero
eso va cambiando ante los nuevos ritmos de la upa, la
contradanza y la habanera entre otros. Nuestro jíbaro
empieza a interpretar ritmos y piezas como el vals, la
mazurka, la polka, el paso doble y otros. Cerca de este
tiempo es que empieza a nacer la "Danza Puertorriqueña"
y sus atrevidos ritmos que algunos de ellos son cercanos a
la guaracha y al seis en sus primeras formas. Entran en el
panorama Manuel Gregorio Tavárez,
Juan Morel Campos,
Juan Ríos Ovalle y muchos otros. Pero es Juan Morel Campos
quien en sus presentaciones y bailes tenía cuatristas entre
sus músicos. Así que ya vemos un instrumento "El Cuatro
Puertorriqueño" calificado como de "plebeyo "codeándose
entre los otros considerados como mas avanzados.
A través de los siglos la música
folclórica puertorriqueña se ha enriquecido de las influencias
españolas, africanas y otras islas del caribe. Ha sido
embajadora del patrimonio histórico cultural puertorriqueño,
preservado a través de la tradición oral, de
generación
en generación y posteriormente por la documentación
investigativa. Se caracteriza por su alegría y la presencia de
temas cotidianos, amorosos y religiosos.
Los géneros folclóricos que más
arraigo han tenido en nuestro pueblo son los conocidos como el
seis
(música puertorriqueña orquestada con los instrumentos de la
guitarra, el güiro, el cuatro y el bongó e interpretada por
trovadores que improvisan en décimas). Su composición musical
consta de compases de dos por cuatro, en dos tiempos con
combinaciones sincopadas,
los bailes de bomba (música y baile
respectivo de origen africano traído por los esclavos a América
que se interpreta con tambores, de los cuales uno también es
llamado bomba. Se toca mayormente con dos tambores, uno de ellos
lleva el ritmo base y el otro entabla una comunicación armoniosa
con el bailador o bailadora. El percusionista de este último
tambor interpreta los movimientos de falda y giros corporales
"en el caso de las mujeres" y el zapateo y movimientos del
sombrero (en el caso de los hombres) como claves para improvisar
su música. En ocasiones, puede haber un cantante que interpreta
un estribillo),
la
plena, canto y baile popular
puertorriqueño de ritmo afroantillano que se canta acompañado de
tres pleneras o panderos principalmente.,
las coplas, la guaracha,
baile de origen andaluz, de ritmo vivo y movimientos rápidos que
consiste de una composición musical de dos por cuatro o cuatro
por ocho. El
vals.
Nació a finales del siglo XVIII, y se convirtió en baile de
salón de mayor sofisticación y delicadeza. Su composición
musical es de tres por cuatro. Música de esta danza,
la mazurka, la polca, los villancicos y cantares religiosos, las
rondas infantiles y el
aguinaldo.
Eran los primeros puertorriqueños. De las montañas y las costas,
salieron los primeros cantaores criollos, personas que
recordaban cantos tradicionales y los cantaban durante los
festivales. Y tambien para los 1800's llegaron los franceses
corsos y de allí salieron trovadores-poetas que
improvisaban la letra al momento de cantarla. La música de
trasfondo era el seis. Y cada seis por su región. Se han contado
casi cien variaciones del seis. Entre ellos se encuentran los
más lentos: el seis mapeyé, el
seis andino y
el seis celinés y entre los más rápidos, el bailable
seis chorreao y
el zapateao. También popular
fue el seis con décima, la que daba al trovador la
oportunidad de destacar su arte de improvisación musical. La
décima obligaba al trovador a cantar en estrofas con líneas de
ocho sílabas, que rimaban de manera específica. Y el canto se
hacía en conjunto de un cuatro, un güiro, y una guitarra u otro
instrumento nativo como el tiple y la bordonúa, hoy casi
desvanecidos. Esta agrupación vino a conocerse como la Orquesta
Jíbara. Y esta agrupación permaneció así por siglos hasta el
presente primordial, pero veamos sus inicios.
De España viajaban compañias
teatrales y musicales que dejaron su impronta en las Antillas
Españolas.
De ellas, Puerto Rico y Cuba fueron
las que cultivaron mayores semejanzas musicales y sin ponerse de
acuerdo, se replicaban (imitaban), pues su influencia o
referencias eran básicamente las mismas. Desde fines del siglo
20 a inicios del 21, podría decirse que Puerto Rico resume a las
tres Antillas, por la gran cantidad de cubanos y dominicanos que
residen en la isla.
La Guaracha:
1800's e inicios de los 1900's
Una de las primeras grabaciones de
guarachas boricuas de Pedro Flores
Sexteto Puerto Rico en nuestro
estilo de guarachas de corte antiguo
Comenzamos
por la Guaracha:
Baile popular de origen andalúz, de un ritmo vivo y movimientos
rápidos que consiste de una composición musical de dos por
cuatro o cuatro por ocho.
Ha sido, tradicionalmente, uno de los ritmos bailables de más
popularidad y aceptación en Puerto Rico debido al carácter
alegre y pícaro de sus letras y del baile. El mismo combina
aspectos de las danzas de origen africano que proliferaron sobre
todo y predominantemente en las costas puertorriqueñas, así como
características de los bailes españoles.
Los orígenes de la guaracha se remontan a España, donde era un
baile zapateado que se bailaba por una sola persona en el
teatro bufo: El baile Flamenco
zapateado con el uso de la guitarra parece ser un ejemplo de la
influencia a la que nos referimos. Bufo: Teatro popular que
utiliza la imaginería social para denunciar los abusos. Los
personajes principales eran el negrito, el gallego y la mulata.
Se utilizaba la técnica del blackface (actores blancos que se
pintaban de negro).
Las
compañias españolas del teatro Bufo llegaban primero a Cuba, y
antes de regresar a España, pasaban por Puerto Rico, trayendo
consigo una serie de experiencias que habian vivido y recogido
de su paso por las Antillas y pueblos españoles en el Mar Caribe.
Durante el siglo XIX, a Puerto Rico y Cuba llegaban muchas compañías de
bufos procedentes de España. Estos trajeron consigo la guaracha,
siendo las mismas, canciones picarescas que se cantaban entre
actos teatrales para entretener al público. Posteriormente, la
guaracha en Puerto Rico adquirió su propio estilo, y llegó a
formar parte de otras costumbres puertorriqueñas, tales como los
rosarios cantaos, el baquiné: Velorio o fiesta en
honor a un niño muerto. Se celebraba con música y baile, en
lugar de rezos, ya que al ser niño se creía que se convertiría
en un angelito por estar libre de pecado. En Puerto Rico, se
realizó hasta mediados del siglo XX en las zonas costeras y
montañosas,
la música navideña y los cantos infantiles.
La melodía de la guaracha sigue las características de la música
popular. Sus frases son cortas y las notas, breves. Las unidades
musicales son de cuatro u ocho compases y su armonía se limita
principalmente a acordes fundamentales, es decir, tónica,
dominante y subdominante, pero no como en el
seis: música puertorriqueña
orquestada con los instrumentos de la guitarra, el güiro, el
cuatro y el bongó e interpretada por trovadores que improvisan
en décimas. Su composición musical consta de compases de dos por
cuatro, en dos tiempos con combinaciones sincopadas.,
el cual repite un mismo patrón constantemente.
La letra de la guaracha no se ciñe a una sola forma poética, es
decir, hay diversidad en la métrica. Por lo general, se canta
con un solista o dúo acompañado de un coro con el cual dialoga.
En cuanto a la instrumentación, el güiro lleva el ritmo y la
guitarra y el cuatro son el acompañamiento. En la actualidad,
también se utilizan otros instrumentos como los palitos, las
maracas, el cencerro y la trompeta.
La guaracha es un ritmo esencialmente bailable, pero también se
considera música de parranda navideña, así como música popular
de conciertos. Varios de los ritmos populares de la actualidad
heredan características de la guaracha, como, por ejemplo, la
salsa y la rumba.
En el siglo XIX, tanto Juan Ríos Ovalle como Juan Morel Campos
incorporaron la guaracha en sus danzas, danzones y zarzuelas.
Durante el siglo XX, el ritmo fue cultivado entre otros, por
Rafael Hernández, Bobby Capó y Pedro Flores, Tite Curet Alonso,
Rafael Cortijo, Ismael Rivera, El Gran Combo, Francisco Alvarado
y Luigi Texidor. Algunas guarachas populares son
Hermoso
Bouquet, Pueblo Latino, Borracho No Vale, Compay Póngase Duro,
asi como, Mujer Trigueña, Marinerito y Piel Canela.
Eventualmente Cortijo y su Combo como el Gran Combo populizarían
la guaracha como Salsa.
La Música jíbara:
La
música jíbara se compone de dos categorías de géneros: La música
vocal y la música instrumental. Entre esta categoría de géneros,
Manuel Alonso ya en su libro El Gíbaro, publicado en el 1849,
distingue muchos de estos géneros, como los 'bailes de el garabato'.
(El garabato era y sigue siendo un gancho de madera utilizado
por el jíbaro como herramienta de trabajo para talar con el
filo del machete.)
Los géneros de la música vocal se interpretan
con una orquesta de unos instrumentos sencillos compuestos de cuatro,
guitarra y güiro, a los cuales se le suman uno o varios
cantantes, o trovadores. En esta orquesta se refuerzan comunmente
durante el transcurso del Siglo XX con bongoes, maracas, palitos
o claves. En ocasiones se utiliza la sinfonía de mano conocida
también como sinfonía de botones, y en otras ocasiones se añaden
a ésta, instrumentos como las congas y el cencerro, el, que
vendría a ser nuestra marca nacional luego.
Los géneros
mas comunes de la música vocal campesina son el aguinaldo y el
seis. Estos géneros son interpretados por dos tipos de cantantes:
El cantante que selecciona décimas de la tradición oral, o el
trovador o trovadora que improvisa sus décimas al instante
utilizando generalmente un pié forzado que corresponde al último
verso de la décima. Los aguinaldos y los seises se interpretan
durante todo el año en diferentes eventos como en fiestas
patronales, o en rituales religiosos como o en rosarios cantaos,
en bodas, bautismos, en fiestas populares, y en bailes jíbaros.
Sin embargo adquieren especial importancia durante la época
navideña, particularmente en las músicas de trullas o parrandas
de
promesas. En algunas regiones se cantan, conjuntamente con el
aguinaldo y el seis, cadenas y caballos como parte de las
promesas navideñas, fuera del area metrpolitana de San Juan.
Origen de los aguinaldos:
El
aguinaldo proviene del villancico español. La voz villancico,
se aplicaba en España para definir las canciones de villanos o
gentes de las villas en las diferentes épocas del año. Con la
colonización se introducen a Puerto Rico los ciclos de
villancicos de aguinaldos de la época navideña, géneros que
comienzan a transformarse en dos categorías musicales:
1. Los
cantos jíbaros puertorriqueños que se identifican como
aguinaldos jíbaros; y el otro:
2. El villancico, que mantiene su nombre original español
pero asociado a la canción navideña parecida al concepto de
Christmas Carol americano o europeo.
En Puerto Rico, el aguinaldo campesino se desarrolla en diversos
estilos o variantes regionales que se identifican con nombre y
apellido. Ejemplo de estos son el aguinaldo cagüeño, o estilo
particular del aguinaldo del pueblo de Caguas. Así por el estilo
tenemos el aguinaldo isabelino, de Isabela, el aguinaldo
orocoveño, de orocovis, y el aguinaldo yumac de Camuy (Camuy al
revés). Existen además aguinaldos identificados con todos los
jíbaros, como el aguinaldo jíbaro.
Los
aguinaldos jíbaros se transforman en géneros musicales criollos
incorporando ritmos negros, de clave, y ritmos indoamericanos,
y así utilizando instrumentos autóctonos como el cuatro y el güiro
puertorriqueño, asignándole el jíbaro una función social
específica durante la época navideña, que es la llevar música en
parrandas y trullas a familiares y amigos. Estas parrandas o
trullas se hacen con un propósito mítico o mágico-religioso
específico que es el de solicitar protección divina a los
miembros de la comunidad por medio de promesas navideñas que se
le ofrecen a los Reyes Magos, a la Virgen, o al Niñito Jesús.
Los
villancicos en su mayoría se mantienen como géneros asociados
con las instituciones escolares o religiosas, muchos manteniendo
las característica métricas europeas del vals, géneros que yo
clasificos como villancicos-valses.
Venid
Pastores, venid o venid a Belén o venid al portal
yo no me voy de Belén sin el Niño Jesús un momento adorar
Alegría,
alegría, alegría
alegría, alegría y placer
que la Virgen va de paso con su esposo a Belén...
Como canción
navideña, el villancico, similar al
Christmas Carol
europeo, o americano, se convierte en una especie de canción
navideña, folklórica, popular o clásica. Entre estos géneros
que forman una especia de folklore navideño internacional y
local podemos mencionar: "Joy to the World" the George Frederic
Händel, "Noche de Paz" ("Silent Night" de Franz Gruber), y "Adeste
Fidelis". Entre los ejemplos de villancicos clásicos
puertorriqueños hay que mencionar de forma obligada el "Villancico
Yaucano" de Amaury Veray. El "Villancico Yaucano" es una
canción de arte con métrica de vals que ha trascendido de la
sala de concierto a la música popular tradicional de la navidad
puertorriqueña.
La Bomba:
La bomba es un género de música único y típico de
Puerto Rico. Aunque los inicios son inciertos sobre el origen
exacto, algunos historiadores aseguran que se sus inicios están a
finales del siglo 17 en la costa sur de
Puerto Rico, donde la mayoría de sus habitantes son de origen
africano.
La
bomba emergió como una expresión muy importante dentro del
sistema de la esclavitud y como una forma de fuerza espiritual.
Al principio
la Bomba se prohibía a las religiones africanas asentadas en
Puerto Rico por el gobierno español.
Era en los
bailes de bomba donde los africanos esclavizados celebraron
bautismos y uniones, pero también planeaban sus rebeliones. Por
esta razón, estas celebraciones fueron permitidas solamente los
domingos y los días de fiesta conforme al calendario de la
iglesia.
En las fiestas patronales de Santiago Apostol de
Loiza, se tocaba la bomba mientras los celebrantes usaban las
máscaras típicas de los vejigantes. Se suponía que la máscara
podía espantar los espíritus perversos. La Bomba emerge así como
uno de los géneros que aunque hecho por manos africanas se vino
a convertir con el paso de los años en uno típicamente
puertorriqueño.
La bomba esta asociada con zonas de las costas
predominantemente negras como Loíza Aldea, Arroyo, Guayama,
Ponce, San Mateo de los Cangrejos (Santurce y Carolina), Mayagüez, o Cataño.
Bomba
significa tambor, bomba significa baile, y bomba significa
canto. Como canción, la bomba se canta para ser bailada; y como
baile para improvisar pasos estimulados por el toque de uno de
los tambores de bomba denominado tambor primo o buleador. Hay
varios tipos de bomba y la mayor parte de ellos hacen referencia
a lo francés.
Bomba
tambor:
Los tambores
de bombas se construían con barriles utilizados para envasar ron;
de aquí que se conozcan las bomba como barriles, o barriles de
bomba. Existen dos tipos de tambores de bomba: el tambor primo o
primer barril, tanbién llamado burlador o buleador, o requinto;
y el tambor segundo, segundo barril, o seguidor. Al tambor
segundo se le llama guiador; o repicador. La función rítmica del
tambor segundo es la de mantener un patrón o toque rítmico de
bomba constante y estable que sirva de base para la
improvisación del tambor primo. El toque del tambor segundo
define el estilo y el nombre del baile bomba que se está
interpretando.
Existen
diferentes estilos o toques de bombas en distintas regiones
costeras de Puerto Rico. Estos se identfican como:
sones de
bomba, seises de bomba, o meramente
bomba. Según el
Dr. Emanuel Dufrasne, Don William Archeval, músico y bailarín
ponceño, identifica ocho sones de bomba sureña como:
güembé,
leró, gracimá, holandé, calindá, yubá, belén, cunyá, y mariandá.
Curiosamente
en esta tradición sureña las mujeres son las que cantan,
alternando el solo y coro de las bombas. La solista toca una
maraca; en ocasiones dos maracas pero en una sola mano. Los
tocadores de bombas se sientan sobre el barril, y en uno de los
costados del seguidor se toca con uno o dos palos llamados
cuá. En Loíza , el güiro es de uso mas común que en
Cangrejos (Santurce).
Don Rafael
Cepeda, quien representa la tradición de la bomba del norte que
es dominada por Cangrejos (Santurce) y Loíza, se refiere a los
toques de bomba como seises de bomba. Entre su repertorio
incluye sicá,
paulé,
holándes, yubá, y elcuembé.
Loíza Aldea conserva entre esta denominación de seises de
bomba, el seis corrido. En la tradición del norte,
los hombres cantan, y los tocadores de bomba ejecutan su
instrumento sentados frente al tambor. Solamente se sientan
sobre el instrumento cuando un buen bailador o bailadora reta al
buleador o tambor primo. Ante el reto del bailador o bailadora,
el tambor es tirado al piso y entonces el tocador de bomba se
siena sobre el instrumento persiguiento al bailador o bailadora
con toques mas enérgicos y agresivos resultando en una excelente
controversia de baile y tambor.
La Plena:
Documental
sobre los origenes de la Plena
Plena con Mon
Rivera
Plena con Mon
Rivera
Plena de
Salón con Cesar Concepción
La plena nace en
el Siglo XX y este es, uno de los géneros musicales de mas popularidad
en todo Puerto Rico. Generalmente la asociamos con gente humilde de
las barriadas pobres. Pero para muchos la plena pertenece al arrabal;
para otros, pertenece a las zonas cañeras asociadas con las
rutas del viejo tren, los ponceños la reclaman como de su región,
pero la realidad es que la plena es de todos los puertorriqueños. Un vistazo
al perfil socio cultural de nuestra plena revela que la plena:
Surgida a
principios del siglo XX en la zona costera del sur de la isla de
Puerto Rico. El cuatro, el güiro, la pandereta y la armónica
fueron los instrumentos que iniciaron la interpretación de la
Plena. Temáticas humorísticas, satíricas o burlonas caracterizan
los temas que responden a la clásica fórmula solista-coro.
A principios
del siglo XX, la plena es la forma que mejor caracteriza
a la música popular del Puerto Rico Criollo. Su nacimiento se
ubica en la zona del sur de la isla, específicamente en las
localidades de Ponce, Guayama, Salinas... Según Augusto Coen,
compositor e investigador de la música puertorriqueña, las
primeras plenas se tocaron en un lugar conocido como La Joya del
Castillo, en Ponce. Allí se reunía un grupo de músicos populares
integrado por Alfredo - que tocaba la armónica de boca -,
Bernabé Aranzame, Tonito Laporte, y el guía, Joselino
Oppenheimer, alias Bumbum, que dieron a conocer las primeras
muestras del género. Los instrumentos iniciales eran la guitarra
-o el cuatro-, el güiro, la pandereta y la armónica. Con
el tiempo, se agregaron otras dos panderetas, de suerte que una
principal -llamada requinto- realizaba improvisaciones mientras
las otras mantenían una base rítmica constante. Luego, la
armónica fue sustituida por el acordeón. La pandereta usada por
los músicos boricuas era más bien un pandero, ya que se facturó
incluso, en los inicios, con cajas de madera de empaquetar queso,
de forma redonda, a las que se le montaba el cuero,
preferentemente de chiva o chivo, que era estirado con fuego;
más tarde, se usaron frenos de vehículos automotrices que daban
mejor sonido.
La plena es
de forma binaria, y consta de una estrofa de dos períodos, con
un interludio instrumental intercalado. Muestra la alternancia
de solista y coro común a toda la expresión musical
afroamericana. Mientras el guía vocal hace sus inspiraciones, el
coro repite el motivo temático central, que responde al estilo
del refranero. Habitualmente, las voces cantan al unísono,
aunque a veces se mueven por terceras o sextas. El texto se
estructura a la manera de la copla, con versos de seis y ocho
sílabas; a veces se combinan de ocho y de diez. Las piezas de
este género se componen tanto en modo mayor como en modo menor.
Su melodía ondulante se expresa mediante frases breves, que
hacen un contrapunto con el doble tiempo marcado por la sección
rítmica, lo que origina un producto muy sincopado.
La gama
temática abarca asuntos referidos a la vida cotidiana,
especialmente del ámbito popular, en tono humorístico, satírico,
burlón. Los sucesos políticos y los afanes sociales entran al
mundo
1. Se
cultiva en los arrabales con temas de la vida real como "Cortaron
a Elena", "Mamita llegó el Obispo, llegó el Obispo de
Roma", "Temporal, temporal, que terrible temporal". Estos temas
sirven de base satírica o cómica para inspirar la alegría del
baile plenístico con un conjunto musical compuesto de panderos,
cuatros, sinfonía de mano, guitarra, güiro, marímbula, cencerros,
entre otros instrumentos.
2. Que la
plena se populariza en los años de 1920's con Manuel Jiménez-Canario y otros grupos. Sin embargo mucha gente parece
ignorar que Canario era la primera voz en el primer Trío
Borinquen de Rafael Hernández, que fue creado en 1925, en Nueva
York. Ithier, era la segunda voz y Rafael Hernández tocaba la guitarra. Para esta época se popularizaron las plenas de Rafael
Hernández:
Cortaron a Elena,
cortaron a Elena...
Temporal, temporal, allá viene el temporal
Tanta Vanidad, tanta hipocresia...
Pa' Borinquen voy...
y
Monchín del Alma...
3. Que la
plena también se baila y se canta en las zonas campesinas con
el cuatro, la guitarra, y el güiro, reforzandolos esta la orquesta con maracas,
bongoes, y claves, entre otros instrumentos. Rara vez se
utilizan panderos.
4. En los
años 40's y 50;s Cesar Concepción convirtió la plena en baile de
sociedad de los puertorriqueños con temas inspirados en los pueblos, como Yauco, Ponce, y
Mayagüez, utilizando su gran orquesta popular (big band
). Y De ahí surgirá luego Rafael Cortijo y su Combo, quien
tocaba con ellos.
Yauco pueblo
perfumado
con la esencia del café
desde lejos se
te vé
sobre un monte
recostado
pasa un río por
tu lado
que da esplendor
a tu suelo
arriba el
celeste vuelo
de tu monte poderío
empieza cerca
del río
y
termina cerca del cielo.
5. Que para
mas o menos la misma época, Rafael Cortijo con su combo, le
reinyectó una vitalidad distinta a la de Cesar Concepción
identificando la plena como baile de las masas populares.
6. Que el
pueblo fue desarrollando la plena como género de parrandas
navideñas.
Villancico
en estilo de Plena:
Los Tres
Santos Reyes los tres y los tres
los saludaremos con divina fé
Los Tres
Santos Reyes yo los sé contar
Gaspar y Melchor y el Rey Baltazar
7. Que la
plena también se hace popular como música de comparsa, fiestas
callejeras, y carnavales.
Quinto Olivo
Una
noche se oyó
en
borinquén un repique en pandero de plena
Una
noche se oyó
en
borinquén un repique en pandero de plena
Otra
plena tradicional de comparsas:
Mañana por la
mañana
llena tu casa de flores
que seguro te visita
la Virgen de los Dolores
8. -- Y que a la
hora de protestar contra la injusticia, o la corrupción, y la mala administración, con una o dos pleneras, en un recitativo rítmico
rapeado de protesta típico del estilo tradicional
plenístico, el trabajador a ritmo de pandero, cencerro, y
güiro,grita las verdades buscando un alivio para lo que
considera un ultraje social, un abuso de poder del patrono, o
del gobierno, como hoy en día hace el reggaeton.
La danza:
Nuestra
danza puertorriqueña claramente evoluciona de la contradanza europea
inglesa y francesa. El
origen del término contradance, es inglés y se utiliza en el
siglo XVIII para identificar las danzas del campo o danzas
campesinas que se popularizan como consecuencia de el nuevo orden
social, europeo donde se crea la Revolución Francesa. En el término
de la
contradanza, resulta ser del anglicismo "country dances"
el que en la
actualidad se puede definir como serie de danzas folklóricas o
danzas campesinas inglesas que se pusieron de moda cuando los
ingleses intelectuales descubrieron la cultura de las sociedades
campesinas y las asimilan trayéndolas a las zonas urbanas.
A partir de la Revolución Francesa se va formando un nuevo orden
social que reconoce en las danzas y géneros campesinos la base
de su nacionalidad. Todos los países comienza a descubrir su
nacionalismo musical y explotarlo como símbolo de orgullo
nacional. Las danzas se ponen de moda durante el siglo XVIII,
creando además modelos representativos identidad nacional en
todos los pueblos de Europa y América. Como parte de este nuevo
orden se desarrollan orgullos nacionales como el alemán que
siente que sus danzas campesinas poseen elementos de culturas
antiguas asociadas con la raza aria. Así todos los pueblos van
copiando este modelo de orgullo nacional inspirados en los
country dances, o contradanzas que en Francia se denominan
contre-dance y que al llegar a España se traduce como
contradanzas españolas, y en América como contradanzas cubanas,
venezolanas, o puertorriqueñas.
Como modelo
nacional las contradanzas intercalan rapidamente motivos
rítmicos e instrumentos nacionales para poder de esta manera
acuñar el apellido que las va identificar durante este nuevo
orden social como contradanzas nacionales, o meramente danzas
alemanas, danzas cubanas, o danzas puertorriqueñas. Muchas de
estas contradanzas se van independizando adquiriendo sus nombres
propios como el cotillón, el rigodón, y el gallop, que se ponen
de moda en Puerto Rico como parte de esa fiebre de nacionalismo
inspirado por la Revolución Francesa. Debido a este movimiento
nacionalista europeo las danzas francesas se ponen de moda,
pero rapidamente el espíritu del movimiento va definiendo en
cada país las danzas representativas nacionales.
De aquí surje la fiebre de la
identidad nacional puertorriqueña que escoje la danza
puertorriqueña como género de identidad nacional inspirado en
ese moviento que es bautizado para mediados del siglo XVIII
(1850) como el Movimiento Romántico Nacionalista. Curiosamente
esta fiebre de identidad nacional musical es la que promueve
Lola Rodríguez de Tió cuando le escribe a Ramón Emeterio
Betances y a Ruiz Belvis que "hace falta un himno que haga salir
fusiles". Claro ya los franceses se habían llenado de fuerza de
lucha con la marsellesa, música que le sirvió de carga impulsiva
para empujar su revolución. Inmediatamente, en vez de componer
un himno de lucha, el movimiento revolucionario puertorriqueño
busca entre su folklore la danza nacional mas popular del
momento que era 'La Borinqueña' de Francisco Ramírez, y le
cambia la letra a una letra revolucionaria, naciendo así
el himno de Puerto Rico.