El término "Oriente Medio" sirve para nombrar un área
geográfica, pero no tiene fronteras precisas. La definición
(arbitraria) más común incluye: Bahrein, Egipto, Irán, Iraq,
Israel, Jordania, Kuwait, Líbano, Omán, Qatar, Arabia Saudí,
Sudán, Somalia, Siria, Turquía, los Emiratos Árabes Unidos,
Yemen y los territorios controlados por la Autoridad
Nacional Palestina (la Franja de Gaza y parte de Cisjordania).
Egipto y su Península de Sinaí en Asia, suele considerarse
parte del Oriente Medio, aunque la mayor parte del
territorio geográficamente esté en África del Norte. Los
medios internacionales, cada vez más, llaman "norteafricanas"
(o magrebíes) a las naciones de África del Norte sin lazos
con Asia, como Libia, Túnez y Argelia, contraponiéndolas al
Oriente Medio (Pakistan a Egipto -en Asia). Sin embargo,
pueden ser consideradas parte del Oriente Medio. Somalia, un
país islámico de África Oriental, es, como Pakistán también
es considerada como parte del "Gran Oriente Medio". Otros
países que ocasionalmente se incluyen en la definición son
los de la región del Cáucaso (Azerbaiyán, Armenia y
Georgia), Chipre y el Magreb.
El Oriente Medio tiene fundamentalmente tierras áridas y
semi-áridas, con algunos pastizales y desiertos.La reserva y
el suministro de agua constituyen un problema en varias
zonas de Oriente Medio, ya que el rápido incremento de la
población hace aumentar la demanda, dificultada por la
salinidad y la contaminación. Los grandes ríos, incluido el
Nilo y el Éufrates, proveen la irrigación necesaria para
sostener las actividades agrícolas.
Esta región alberga el creciente fértil, que abarca parte
de los territorios del Antiguo Egipto, el Levante y
Mesopotamia, donde se considera que empezó la revolución
neolítica en Occidente.